viernes, 26 de noviembre de 2010

LUJO SUSTENTABLE, OTRA GUEVADA MAYOR

Nadie puede decir que el diario La Nación sea ostentoso. Y lo corroboramos. Cuando no quedaba casi nada para inventar, ahora apareció un Centro de Estudios para el Lujo Sustentable, con su correspondiente traducción al inglés. Leemos aquíEn rojo y entre paréntesis, nuestros comentarios, que no pecan de objetividad




La ostentación como valor en el mercado del lujo fue quedando atrás en la última década. Eso, por la maldita inseguridad: ahora conviene pasar inadvertido. Eso les sucede, por ejemplo, a los israelies que pasean por la Franja de Gaza en tren turístico. O a las clases opulentas encerradas en countries del GBA, como Horacio García Belsunce, que diariamente se disfraza de linyera y así vestido se va a tomar un pernod al barcito de la estación Celaya.  Mientras que hace diez años los consumos de este segmento se motivaban exclusivamente por el placer de comprar, ahora se busca cada vez más que las marcas reflejen preocupaciones por los problemas sociales y medioambientales. El aborto es un problema social. Valeria Mazza luce una remerita con la leyenda Let it be. Martínez de Hoz (cuando le daban las piernas) y Alberto Kohan (idem) cazaban tigres en Sudáfrica, portando cargadores con balas ecológicas, esos proyectiles bieintencionados que matan dulcemente volatilizando el cerebro de los felinos.

Leemos también en La Nación, en el mismo chivo:
La legendaria joyería Tiffany ya hace un tiempo que dejó de hacer productos con coral para contribuir a su conservación. En la misma línea, la mayoría de los diseñadores internacionales dejaron de lado el uso de pieles naturales para sus aclamadas colecciones. Ahora se hacen de plástico imitación coral, por millones, en China. Las joyas Tiffany se fabrican en la coqueta (para los incomprensibles criterios chinos) localidad de Kon Fu Cio, sobre el Mar Amarillo. El efecto es tan real, que los collares parecen de coral imitación plástico, o de plástico imitación plástico. Pero todo es sustentable, palabra de moda que atraviesa los nuevos paradigmas culturales. Hoy nadie entiende si uno dice tirifilo, chichipio, pero si le dicen sustentable, ahi sí. Por ejemplo, Botnia es sustentable. El arsénico en las industrias del GBA, también. El ídem en la minería cordillerana, no. ¿Qué significa sustentable? Nunca lo supìmos con certeza, pero si uno busca en internet enseguida encuentra 50 definiciones, todas prolijamente copiadas de la Wiki. ¿Lo que se sostiene es lo que da ganancia? ¿Lo que no poluciona el aire, o el agua? ¿Entonces, es conveniente que volvamos al estado natural y a la biodiversidad? ¿Un corpiño es sustentable? Se me responderá: a veces sí, a veces no.
Según la coordinadora del Centro de Estudios para el Lujo Sustentable, los productos o servicios de más alta calidad en el futuro serán aquellos que generen mayores beneficios a quienes estén involucrados en la cadena de valor. Ahhh, ahora sí.

La atención al cliente y la personalización son valores más recientes que incorporaron las marcas premium , que antes se enfocaban exclusivamente en ventas. Louis Vuitton, por ejemplo, modifica el tamaño del logo de sus emblemáticas carteras a gusto del consumidor. Pero mire usté!  Si el logo es más chico, se paga un adicional. Y sin logo? En la misma línea, Apple graba las computadoras y otros aparatos con las iniciales de su propietario.
Para el futuro, Sierra cree que habrá una revalorización del arte como origen de los objetos y marcas de lujo. "Luego de una etapa de industrialización, el lujo va a volver a defender nuevas formas artesanales de hacer las cosas. La escasez es un valor importante", señala. O sea: el nuevo lujo consiste en parecer pobre, abominable, excluido, negro, desdentado, carcomido por parasitosis varias, hipoalimentado, rodeado de moscas, etc., y todo eso, muy bien pagado para volver voluntariamente a la realidad real, en cuanto todas esas virtudes artesanales se hagan insoportables. Mire cómo la Chacha hace las empanadas con el palote, sobre una mesa sucia, pero es preferible el delivery.
Este post no es sustentable y se autodestruirá en 5 segundos.

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