jueves, 10 de junio de 2010

Para Teodoro Boot, "comedia ligera" lo de Gualeguaychú

En el día de ayer y sin que nadie se lo pidiera, el juez federal Gustavo Pimentel recordó al gobierno la existencia de un fallo de tres años atrás que, muy al estilo tiro el cascote y escondo la mano, le ordena “arbitrar los medios necesarios para garantizar la libre circulación” por el puente internacional San Martín. 
Un absurdo del ministro Randazzo fue la primera respuesta oficial: “Haremos cumplir la orden judicial sin represión”. Pero luego dejó entrever cuál sería la estrategia: ante una eventual negativa de los asambleístas piqueteros a despejar la ruta, la Gendarmería identificaría a los presentes a fin de denunciarlos por incumplimiento de una orden judicial, con lo que siguió deslizándose en la más oscura de las ambigüedades. No obstante, en Gualeguaychú cundió la histeria (la histeria es así, loca) y pronto comenzó la movilización de vecinos hacia Arroyo Verde, sitio donde un acoplado, cuatro viejos y varios gendarmes impiden el tránsito hacia el Uruguay. Lo reducido de la fuerza básica de corte no habla necesariamente del cada día más menguante apoyo al corte, sino de su irracionalidad, pues no es posible sostenerlo de otro modo. 
Y de la irracionalidad de una asamblea cada vez más reducida e intolerante que si bien no sostiene una medida al día de hoy nada popular (la mayoría de los vecinos opina que el corte es tan estúpido como contraproducente) lleva a cabo una lucha que sí es popular. 
Aclaremos que es popular hasta casi volverse unánime el rechazo a la instalación de la planta (aunque la planta esté ahí, vivita y humeando), pero no el “ambientalismo”: a nadie le importa un pito la contaminación. Así como le enfurece la contaminación que tiene enfrente, la asamblea finge demencia ante la contaminación que tiene encima, la de los agroquímicos, habitual y generosamente esparcidos por varios de sus miembros más prominentes. Ante lo cual y por su parte, los vecinos, como es habitual, se alzan de hombros, entre indiferentes y resignados. 
En el día de hoy, el ministro Fernández precisó el sentido de las generalidades de su colega: el gobierno se presentará como querellante y denunciará penalmente –y demandará por daños y perjuicios– a los individuos que impidan la libre circulación hacia el puente general San Martín, una medida muy poco práctica, de aplicación presumiblemente turbulenta y cuyo público se encuentra del otro lado del río. El resultado inmediato será revitalizar al sector más psicótico de la asamblea, que en los últimos tiempos viene dominándola (y aislándola) así como los locos hacen las cosas: a fuerza de gritos, accesos frenéticos, discursos autistas y no poca prepotencia. 
En Página 12, con bastante liviandad, el periodista Martín Granovsky generaliza: “(El gobierno) tenía tres posibilidades a mano. La primera, reprimir a los que cortan el paso a Uruguay (…) La segunda, romper con Uruguay y tejer una alianza a muerte con la vanguardia de Gualeguaychú. La tercera, apostar a las relaciones con Uruguay y dejar al grupo de cortadores en el pasado. Escogió la tercera.”
Sin embargo, una cuarta alternativa –o primera, cronológicamente hablando– era factible y consistía en algo tan simple como retirar de Arroyo Verde los efectivos de gendarmería que ofician de custodia de los cuatro viejos y el acoplado, evitando así que cualquiera llegue con un bidón de gas oil, les prenda fuego y siga viaje rumbo al Uruguay.
Es necesario que las autoridades (y los asambleístas) tomen conciencia de que el corte de la ruta internacional pudo sostenerse en forma ininterrumpida durante tres años sólo gracias al soterrado apoyo oficial y a la evidente protección de Gendarmería.
Cada uno de los actores de esta comedia ligera debería hacerse cargo de su cuota parte en el enredo si se que quiere que no derive en tragedia. Algunos lo van haciendo: el presidente Mujica desanda trabajosamente el camino hacia la nada y el aislamiento emprendido por su predecesor, uno de los principales responsables de que un diferendo menor llegara a un amargo distanciamiento. El otro gran responsable, el gobierno argentino, que después de prestarle al tratado del río Uruguay la misma atención que le dispensaría a un tema de Ricky Maravilla cantado por un borracho en un descampado, sobreactuó una inconsecuente postura ambientalista, desmentida en los hechos todos y cada uno de los días, en todos los órdenes, en las más diversas partes del país, empieza a comportarse con alguna cordura, entendiendo que es tan necesario proteger el río en todo su cauce en forma conjunta con el Uruguay como recomponer las relaciones políticas, económicas y afectivas con el país hermano.
Queda por ver si la asamblea ambiental o al menos el pueblo de Gualeguaychú empieza a reflexionar y actuar como se supone reflexionan y actúan las personas adultas que la conforman o si persiste en los berrinches, llantos y gritos propios de los niños menores a los seis años.
La fábrica está ahí, sólida, concreta, humeante y tangible. Un fallo de la corte a la que la propia asamblea reclamaba acudir dictaminó que su presencia era ilegal, violatoria del tratado entre los dos países, pero que hasta el momento no había contaminado, con lo que no había razones para que no siguiera estando tan sólida, concreta y humeante como hasta entonces. Aferrarse a consignas tan ingeniosas como estúpidas del estilo de acusar al Uruguay de “violador serial” no es más que un ejercicio masturbatorio, y persistir en un contraproducente corte de ruta, propio de internos de un frenopático: la planta seguirá ahí hasta tanto el pueblo uruguayo no decida lo contrario. Nadie más puede decidir al respecto. Resulta entonces muy difícil de entender la persistencia en una medida cuyo único resultado práctico es agredir, perjudicar e indignar a quién al final de cuentas tiene la decisión. 
Le toca entonces a la asamblea ambiental y –o en su defecto– al pueblo de Gualeguaychú aportar su cuota de madurez y sentido común para evitar lo único que se puede evitar, y que no es poco: la contaminación por parte de Botnia‑UPM y la instalación de nuevos emprendimientos contaminantes. 
Y esto sólo puede hacerse en conjunto con el gobierno y el pueblo uruguayos.

Texto escrito por Teodoro Boot, oscuro escritor domiciliado en Gualeguaychú

El rejunte del espanto o el espanto del rejunte

Duhalde, el pequeño titiritero.
Conviene que estén juntos? Mejor que vayan separados? Está la sociedad madura para entender que ellos, más algunos ausentes (desde Martínez de Hoz para acá) SON LOS QUE HUNDIERON LA NACIÓN?
Es cierto: hay muchos coroneles y ningún soldado. Y todos quieren: esa será su perdición.

miércoles, 9 de junio de 2010

Asambleístas de Gualeguaychú, vuelvan las caras

Hoy en día, no alcanzan a cien los protagonistas del corte. Gualeguaychú tiene 60.000 habitantes. Era necesaria la palabra oficial, porque minutos antes del anuncio hecho por Aníbal Fernández, TN sugería que se preparaba un desproporcionado operativo de represión por parte de la Gendarmería. Hoy mismo, van Der Kooy escribió en Clarín que el ministro Alac no estaba ni siquiera en condiciones de conducir a un grupo de boy scouts.

Si el Gobierno, en un gesto de paciencia extrema, decide iniciar acciones penales y civiles contra los participantes del corte, se abrirán los morosos tiempos de la justicia. Con lo que se evita un enfrentamiento.
De hecho, el corte había perdido la popularidad que tuvo en un principio y su pertinencia, su legitimidad diríamos, por cuanto fueron los propios asambleístas los que exigieron al gobierno que se presentara a la Corte de La Haya. Y ahora que no les gusta o que no fue lo que se había creído, protestan.
Hay en toda esta situación una lastimosa desorientación respecto de la capacidad de pensamiento de estos actores, los más visibles pero menos importantes de la cuestión en juego.
Esta cuestión en juego es el modelo de producción regional impuesto por el Banco Mundial y las corporaciones desde los 80. Como ha quedado demostrado, no solo hay una cuestión de contaminación sino también una aceleración en el agotamiento del agua dulce de la que el eucalipto para celulosa consume para crecer.
Si esto es invariable, si solo se puede nadar sobre la ola de un modo de producción impuesto, después vienen las responsabilidades gubernamentales a todo nivel. Recordemos que Alberto Fernández, en 2006/2007, negoció la instalación de la pastera Ence cerca de Colonia. Que ex-gobernadores (Busti y Puerta, por ejemplo) tienen plantaciones de eucaliptos en la Mesopotamia. Y que el gobierno uruguayo, ni siquiera el actual, tiene la intención de retocar el vergonzoso Tratado de Protección de Inversiones Extranjeras firmado con Finlandia.
Reconozcamos que las demandas ambientales forman parte de los nuevos paradigmas de la sociedad global. Así como en la etapa de constitución de los Estados-nación a nadie se le hubiera ocurrido plantear los derechos de los gays a contraer matrimonio, o los derechos de los originarios, porque las burguesías impusieron su visión a sangre u fuego y no por medio de consensos, tampoco la Revolución Industrial que fue el modo de producción de esa etapa, se detuvo en cuestiones de medio ambiente. No hubo ríos y atmósferas más contaminadas que las de las naciones centrales de Europa (norte de Italia, Manchester, Francia, Alemania, luego Polonia, Bélgica, Países Bajos, etc.) en los siglos XVII a XIX, pero allí está el origen de la mayor parte de nuestro confort actual. Y el Riachuelo es acaso el ejemplo más acabado de ese mismo modelo.
También la promoción del turismo forma parte de esos mismos paradigmas que llamaremos, sin ninguna precisión, posmodernos. Ningún país en serio vive del turismo, ni es posible que 45 millones de habitantes se avengan a convertirse en sirvientes (en cuanto a servir, atender, distraer) del turismo. Que es lo que la gente de Gualeguaychú creyó, inocentemente.
La desorientación de esos actores no terminó allí, sin embargo. Mientras se denunciaba la polución atmosférica producida por la pastera, toda la zona rural de Gualeguaychú vive del modelo sojero-glifosato. 
La ecuación era entonces soja en el agro, turismo en la ciudad.
La presencia de conocidos forajidos de la Mesa de Enlace en el corte del puente y en los de la 125 es prueba de ello. Fue así como De Ángeli consiguió presencia mediática. 
El turismo es engañoso. Se nos hace creer que los ingresos por turismo de los países europeos son tan fabulosos que si nosotros nos dedicáramos a eso (si no tenemos un Partenón, ofrecemos unas cataratas, y así) ya no deberíamos trabajar. Servir sí, en todo caso.
Europa no vive de los turistas japoneses que sacan fotos. Europa vive de los recursos que sigue extrayendo de los países periféricos. El verdadero negocio se llama Santander Rio, Telefónica, Siemens, Credite Suisse, Barrick, Saab, Scania, Mercedes Benz, Deutsche Bank, Royal Dutch Shell, etc etc.
Es hora de que los asambleístas recapaciten. El poder viene buscando sangre desde hace rato. Morales Solá y van Der Kooy reclaman que de una vez por todas el gobierno envíe a la gendarmería. Es hora de que los asambleístas pongan su atención sobre el modelo sojero.
Y bien por el gobierno, que en lugar de enviar a los centuriones, empuja despacito.


martes, 8 de junio de 2010

El avistaje de ballenas en Pto Madryn comenzó con un accidente

Todos los años, puntualmente el 6 de junio, las ballenas francas se reúnen al abrigo de la península de Valdez para iniciar su período de apareamiento.

Son muchos los interrogantes que abre ese ciclo tan esperado por hoteleros, cantineros, compañías de aviación y fotógrafos de Puerto Madryn:
¿Que secreto mandato de la naturaleza las lleva a concurrir el 6 de junio y no, pongamos, antes del comienzo del ciclo escolar a fin de que puedan convertirse en una inopinada fuente de educación sexual in situ? ¿Cuál es su noción del tiempo, de las horas y los minutos, por no decir de los segundos?
¿Por qué, siendo el apareamiento algo tan placentero incluso para las ballenas, no escogen un clima cálido como el de isla Margarita, Angra o Punta Cana, en lugar de las gélidas aguas del golfo San Jorge?
¿Hay acaso un costado masoquista, una decisión de ir al sur y al frío, en esa decisión de la manada?
Sea como fuere, cada 6 de junio, los golfos de San Jorge y San Matías se convierten en lugares peligrosos.
No por las pacíficas ballenas francas, que comienzan a pizpearse mutuamente con la natural inocencia de los cetáceos, sino por las embarcaciones cargadas de voyeurs que -armados hasta los dientes con cámaras digitales y grabadores de sonido a distancia- merodean los actos sexuales en una prueba más de que la intimidad ya vale poco en este mundo dominado por el capitalismo financiero y los multimedios.
Sea como fuere, el canal Discovery o el programa de ecología que conduce Sergio Elguezábal en TN pronto responderá todas esas preguntas.
La noticia no es esa, de todos modos, y adelantándonos a Clarín ponemos en conocimiento de los lectores que en la tarde de ayer se produjo un accidente protagonizado, si vale el término, por la lancha "Don Sixto IV".
Confundida al parecer con una ballena hembra, la embarcación -con casco de acero y botada hace 35 años en Escocia- fue duramente acosada por un grupo de machos poco dispuestos al diálogo o a hallar consensos.
Del acoso, que duró varias horas, se pasó a los hechos: el macho más atrevido se arrojó sobre la lancha con la peor de las intenciones produciendo su rápido hundimiento -el de la lancha- en las frías aguas del golfo.
Pudimos fotografiar la escena desde otra embarcación que navegaba a una milla de distancia, y confirmamos que no hubo víctimas entre los tripulantes del barco atacado, quienes fotografiaban a las ballenas y también se fotografiaban unos a otros en una muestra cabal de los tiempos que vivimos.
No sabemos, eso sí, que sucedió con la ballena hembra cuyas facciones parecieron recordar al "Don Sixto IV", que ya reposa en el lecho del mar para solaz de futuros equìvocos.

CENTENARES DE BARRABRAVAS REPATRIADOS DESDE SUDÁFRICA

Miles de barrabravas argentinos que se agolpan en los aeropuertos de Sudáfrica, pero para volver antes del comienzo del Mundial, son -para la CNN- la noticia más importante de la jornada. Se considera, afirman los especialistas, que la cifra aumentará en los próximos minutos.
Según TN, estarían relacionados con Néstor Kirchner, o mejor aún, con "la caja" de NK porque la primera referencia es equívoca. Afirma Julio Blank que en la popular de los partidos donde participe Argentina se jugará el primer round de la campaña presidencial para el 2011, en la que el financista es número puesto.
Esta foto (obtenida clandestinamente en una suite del Hotel Savoy) delata el origen de los inadaptados, o acaso el cuadro de Evita es un montaje, y la toma forma parte de la campaña.
Los barrabravas son una singular subcultura del deporte nacional. Viajaron a Sudáfrica convencidos de que si eran capaces de hacerle el aguante a la PF, la de aquel país sería una paseo. Los típicos violentos sin causa.
No son muy leídos, a decir verdad, y eso contribuyó a que cometieran un error fatal. Las rifas con las que compraron los pasajes debieron servir para pintar un comedor de chicos en situación de calle, o agregar unos kilos de arroz a la pila que ya está levantando la muy bienintencionada campaña "Argentina abraza a Argentina".
El escritor británico Tom Sharpe relató (en Exhibición Impúdica y Reunión Tumultuosa) los métodos poco amables de la policía de Pretoria para con los ciudadanos que no pudieran acreditar una pureza 100% aria o boer, y por eso fue deportado de Sudáfrica prohibiéndosele el reingreso de por vida. Pero estas obras no están en la bibliografía habitual de estos inadaptados y desacatados, que no han adquirido todavía conceptos culturales como "ser sudaca".
O en otras palabras, encontraron la horma de sus zapatillas Puma y todos corren a esta altura el peligro de volver nadando.
Aunque la ausencia de hinchas de Racing desmiente que Néstor Kirchner haya financiado los viajes abortados, mucho más probable es que en el área de Seguridad Deportiva de la PF subsistan determinados elementos que quisieron darle una mano a Miguel Ángel Toma permitiéndoles el viaje y luego denunciándo todo a TN para que Sylvestre y Bonelli, las Dos Voces, se regocijaran a dúo como lo demuestra la foto de ambos periodistas en plena tarea.
Eric Ambler (La Máscara de Dimitros) y John Le Carré (El Topo, El Honorable Colegial, Llamada para el Muerto, El Sastre de Panamá, El Jardinero Fiel, etc., etc.) no lo hubieran imaginado mejor.
A días del asunto Ávarez-Altamirano-Burstein-Macri, esta parece ser la tercera o cuarta operación encubierta que el Monje Negro de M***m está conduciendo desde el Hotel Savoy con su grupo variopinto de agentes del recontraespionaje.
Es que Toma, la temática del futbol la conoce lunga.

Acerca de esta mujer, por Juan Montes

Se habló del país virtual y el país real. Entre ambos, emerge a su vez, un tercer país: el país de la percepción que viene a desvirtuar, tímidamente, el apocalipsis que promueve el primero y a descubrir, con la misma timidez, algunas certezas esperanzadoras del segundo. Esta nueva lectura que algún sector de la sociedad comienza a hacer es consecuencia de una actitud política: instalar el debate social, resignificar la participación activa de base y confrontar antiguas dicotomías rayanas al tabú, al prejuicio y en el peor de los casos, al desinterés. Este, y no otro, definitivamente es el mayor y mejor logro de esta mujer, que, guste o no, es la presidenta Cristina Fernández. Todos los demás aspectos son desprendimientos de esta decisión. Y es éste y no otro, definitivamente, el caldero donde hierve el caldo del odio, la sal que hiere al dibuk, las causas que causan terror.
A partir de esta premisa hay que destacar algunos méritos. Entre ellos está el que habiendo sufrido una conspiración de acontecimientos que auguraban su fracaso, pudo salir airosa y sin triunfalismos, como un bote que emerge de la furia tormentosa en el océano. Remontó la crisis internacional, padeció uno de los mayores default de nuestra historia, soportó la más férrea denigración mediática, amortiguó los golpes de una devastadora oposición que huérfana de líderes demócratas verdaderos tiene como fin debilitar a un gobierno que -vaya la paradoja y la hipocresía- la misma oposición integra, aguantó la indiferencia y la adversión de sectores de los que se espera un convenio tácito sobre cuestiones básicas como lo son los derechos humanos, la democratización de los medios y el respeto a las instituciones, la asignación universal y las políticas educacionales.
Los que miran profundo ven lo verdadero. Aquí se inicia otro mérito: esta mujer no salió a derrumbar los castillos de arena desde cuyos balcones profetisas descarriadas o séquitos de cletómanos auguraban catástrofes. Dejó, con paciencia materna, que caigan solos: se dijo que el campo se fundiría, el campo no se fundió; se vaticinó una estampida del dólar y el dólar se mantuvo manso; se pronosticó una política de ajustes y la respuesta fue más medidas sociales; se le endilgó una calidad de títere de su esposo y demostró muy clara su autonomía; se amenazó con una chavinización de la República y mostró estar tan cerca de Chávez como de Lula o Evo Morales, se la tildó de montonera y el único ejército que mostró fueron los fans de 6-7-8.
Esta mujer es más que Chanel y Louis Vuitton. Es la mandataria que aplicó políticas que nadie, desde hace cincuenta años, se animó a aplicar. Y eso es meritorio. Fue más allá en un país donde los límites siempre fueron impuestos por sobre los gobiernos. Y eso, por ser meritorio, es para muchos imperdonable. Y en ese ir más allá descoloca, desconcierta, desestabiliza a todo el arco político que balbucea contradicciones. Néstor Kirchner es predecible y por lógica su Gobierno fue de crecimiento cuantitativo. Esta mujer no construye política, instala el debate de la política misma; no polemiza en primera persona, instala la polémica y deja que los actores sociales polemicen. El Gobierno de esta mujer es cualitativo y eso la diferencia del resto.
En este escenario que esta mujer provocó, en el mejor sentido de la provocación, aparecen dos líneas claramente definidas: retoma políticas inclusivas de Perón y la actitud confrontativa de Eva. Y antes de hacer comparaciones con Perón y con Eva, es preferible arriesgar dos lecturas posibles: este Gobierno es lo más parecido al Gobierno peronista en los últimos cincuenta años y la mujer que lo encarna, antes que otra cosa, antes que ninguna otra cosa, es, como dice un amigo, un cuadro político. Y un cuadro político privilegia, por sobre todas las cosas, su noción colectiva del concepto Patria.
Este Gobierno no tiene muertos propios. No reprimió el default del campo ni las movilizaciones contrarias. Enfrentó a los adversarios, a los opositores y a los enemigos con la palabra, con la invitación a debatir o el desafío a discutir. Y este mérito, genera impotencia y la sucede el odio. Esta mujer quebró los esquemas: no sacó a la CGT a la calle, no movilizó su "clientelismo social", no fue violenta como muchos quizás, peligrosamente, hubieran querido. Fue hasta lugares donde hasta hace cinco años eran impensados: puso en evidencia no sólo el andamiaje de los medios de comunicación, sino además, abrió el debate sobre el rol, la ética y la imparcialidad de los periodistas; desmitificó la soledad de las madres y sacudió el letargo impune de los crímenes de lesa humanidad; adhirió activamente a la más sólida intencionalidad de integración latinoamericana…
¿Cómo no va a generar odio si hace lo que otros gobiernos populares hubieran querido hacer? ¿Cómo no va a generar odio si hace lo que cualquier gobierno antipopular no quisiera que se haga? ¿Cómo no va a generar odio si para colmo esta mujer, es mujer?

lunes, 7 de junio de 2010

CLARÍN QUIERE ESMERILAR LA RELACIÓN ARGENTINO-CHILENA

Bastante tenemos con el gobierno de un país fronterizo que abraza el libre mercado y un TLC con EEUU; bastante tenemos con que se lleven barato el gas desde los 90 para re-exportarlo a California con valor agregado, como para que también se interponga............ la Noble Ernestina.
Durante todo el día, TN está dando un lugar preponderante -entre fútbol y fútbol- a las declaraciones de Miguel Otero, el embajador pinochetista de Chile en nuestro país.
Otero intentó explicar hoy que la entrevista con Hinde Pomeraniec (publicada en Clarín del domingo) fue en realidad un charla privada, pero luego ratificó todo lo dicho: que Chile sin Pinochet sería hoy la Cuba de América del Sur; que antes de Pinochet, Chile era un país mendicante, sin libertad de empresa; que desconoce el apoyo norteamericano al golpe contra Allende; que "la mayor parte de Chile no sintió la dictadura" (sic); que durante el gobierno de Allende no se podía comprar nada importado (como aquí, con Guillermo Moreno); ETCÉTERA ETCÉTERA ETCÉTERA
Tamaño interés de Clarín, cuyos presentadores de noticias increpan a Otero en un tono escandalizado, como de alguien que nunca ha escuchado algo semejante pero tampoco ha entrevistado a seres de la misma calaña, obedece no a la bùsqueda de la verdad ni a la defensa del periodismo independiente, sino a la decisión del Piñera de postergar la venta de su empresa Chilevisión a Cablevisión, la "caja" de Clarín. Un negocio de 160 millones de dólares.
Los chilenos tendrán que hacer su experiencia. La unidad de América latina es prioritaria. El imperio puede inventar cualquier cosa, no será la primera vez ni la última...

CLARÍN NECESITA TIEMPO



El repo realizado por AP a los hijos adoptivos de Ernestina Herrera de Noble denuncia su intención en el propio título: "no se respetan nuestros tiempos".
Porque tiempo es lo que necesita el Grupo.
Tiempo para resolver el entuerto de Papel Prensa. Tiempo para llegar al 2011 construyendo una candidatura mediática mientras esmerilan al gobierno y al proyecto de los Kirchner. Tiempo para avanzar en la maraña judicial impdiendo la vigencia de la nueva ley de Medios. Tiempo para cambiar el plazo de desinversión (art. 161).
Ideas nada neutras como rehenes, imponer, el fin no justifica... etc., somos un número, no ofrece garantías, "un dato más en el escritorio" (?), perjudicar, sirven a esos fines.
Pero quizás lo más valioso de la entrevista es que Marcela reconoce que la información "objetiva", suministrada por el grupo en sus distintas bocas de expendio (Clarín, canal 13, TN, etc.) fue en rigor "un aviso", un aviso publicitario.

Agulla y Sajón deben estar en la lista de periodistas desaparecidos durante la dictadura?

Escucho opiniones. Digo, porque el día del periodista se celebra en la cerrada Crítica. Y no solo su dueño era Antonio Mata: durante la discusión sobre la 125, se puso abiertamente del lado de la Mesa de Enlace.
La revista Confirmado, volviendo al título, propició el golpe de estado del 76 con las plumas de Grondona, Carlos Floria y Heriberto Kahn entre otros.
Sajón hacía lobby para Lanusse en la lucha interna por apoderarse de los bienes de los Graiver. Agulla fue asesinado en el curso de las feroces luchas internas de la dictadura.
Siempre me pareció que esa lista era demasiado corpòrativa, como si Agulla y Sajón también hubieran muerto por la libertad de prensa o expresión, y hubiera algo por encima de la realidad denominado "independencia, objetividad, informar objetivamente", etc.


¿"Soy amigo de Platón, pero más soy amigo de la verdad?"

domingo, 6 de junio de 2010

CUANDO ISRAEL DECIDIÓ SER ESPARTA



(Escrito por Meir Margalit, del Consejo Editorial de SinPermiso)


El ataque y asesinato de los activistas a bordo de la flotilla humanitaria a Gaza puede clasificarse como crónica de un asesinato previsto de antemano. Todo aquel que está al tanto de las prácticas cotidianas desarrolladas en los territorios ocupados podía prever que esta operación acabara con muertos y no debía haberse sorprendido, mucho menos después de la nefasta operación "plomo fundido" a principios del año pasado. Esto era de esperar. Si es licito matar impunemente civiles en Gaza, porque no lo será matar a civiles en aguas del Mediterráneo que a ojos de Israel apoyan al Hamas.
Pero debo confesar que a pesar de que a posteriori es tan obvio que una operación militar de esta envergadura acabara con muertos y a pesar de que es claro que un hilo conductor une al asesinato de 1500 civiles en Gaza con el asesinato de los 9 activistas de la flotilla, a pesar de todo, si unos minutos antes del ataque me hubieran preguntado en que medida esta gente corre peligro de ser baleada por el ejército israelí, mi respuesta hubiera sido negativa. En algún lugar del inconsciente, seguramente, quería creer que hay líneas rojas que Israel no cruzara, y en mi ingenuidad, propia de quien quiere creer que todavía queda algo de sensibilidad en este país, no pude predecir este desenlace tan dramático.
Pero debía haberlo sospechado. Hace mucho que Israel está en un proceso de degeneración paulatina, y marcha por una pendiente que conduce inevitablemente a un precipicio. Desde la ocupación de los territorios palestinos en junio del 67', (algunos dirán incluso desde la misma independencia del Estado de Israel en mayo del 48') Israel eligió ser Esparta y no Israel, prefirió construir un fortín en lugar de construir un país, pudo ser una democracia y prefirió convertirse en una etnocracia, se empecino en ser un volcán en lugar de ser un oasis, y su sociedad dejo de ser pueblo para convertirse en un regimiento. A partir de ese maldito 5 de junio del 67', no hay línea roja que no haya cruzado, y no hay derecho humano que no haya sido degradado, al igual que algunos de los peores estados que haya conocido la historia contemporánea. Esto es el resultado lógico e inevitable de una política militarista, mesiánico y nacionalista, en la cual la tierra paso a ser el máximo valor nacional mientras que valores éticos y morales propios del judaísmo profético fueron relegados a segundo plano y el mandamiento "No Mataras" paso a ser una frase sin sentido. Esto era previsible ya que principios humanos no se pueden corromper sin que se corrompa aquel que los corrompe. En un país en el que el valor de la vida humana es tan bajo, no debe sorprendernos que soldaditos de 20 años sean tan propensos a disparar a civiles. Después de haber pasado un sistemático lavado de cabeza de corte sionista, en el cual todos los gentiles son parte de un complot antisemita que pretende echar a Israel al mar, y después de haber sido entrenados a matar y equipados de armas sofisticadas de pie a cabeza, es lógico que cuando los lanzas a una operación militar, realicen aquello a lo que fueron entrenados, o sea disparar a matar. Para ello, no se necesitan ordenes puntuales de la dirigencia política, ya que este mecanismo funciona como un reflejo condicionado por el cual ante la percepción de peligro, real o imaginario, se dispara a matar, y más da si el peligro proviene de unkasam o de un ridículo tirachinas de niños como la que el ejército israelí mostró como prueba contundente de que los activistas no venían en misión de paz. Pero con toda la furia hacia aquellos soldados, no son ellos los villanos de la historia, sino el gobierno que los manda a ejecutar estas operaciones. Ellos son el núcleo del problema y no solo el actual gobierno sino todos los gobiernos que han pasado en estos últimos 42 años de ocupación, sin diferencia del derechista Likud o del laborismo izquierdista, todos pecaron de militaristas, de expansionistas, de racistas, y todos condujeron al país a este pantano en el cual se está hundiendo, salvo cortas excepciones como lo fuera Rabin antes de ser asesinado precisamente por intentar sacar al país de este círculo vicioso.
A una semana del ataque, Israel esta recapacitando, pero en dirección errada. No se critica la operación en si, sino sus consecuencias políticas y el embrollo generado frente a Europa y los Estados Unidos. Tampoco debe sorprendernos que Israel sea incapaz de entender el real significado de su política, ya que en su limitada concepción de mundo, problemas se solucionan por la fuerza, o como diría un refrán popular- "aquello que no se soluciona con fuerza se soluciona usando más fuerza". Esto es la única forma que Israel conoce para enfrentar problemas, y en su estrechez moral desconoce otro camino más que el abierto por las armas. Es por ello que Israel no sabrá utilizar esta crisis como oportunidad de reflexión, sino por el contrario, esto refuerza la identidad machista israelí y acentúa su convicción de que el mundo entero está en nuestra contra.
Pero este asesinato podría ser un punto de inflexión si los países occidentales entendieran de una vez por todas que Israel es un país pirata. A quien le faltaba una prueba de que Israel actúa como una organización terrorista, a partir de ahora le queda claro que se trata de terrorismo estatal, y es de esperar que de aquí en mas comiencen a tratar a Israel como se trata a un país terrorista Aquel postulado anarquista que dice que cuanto peor-mejor, y que el sistema que sostiene la ocupación llegara a un punto en que se desvanecerá por sí sola, tal vez sea cierto, pero el pueblo palestino no tiene tiempo de esperar. Este es el momento de presión.
Esta presión no tiene por objeto dañar a Israel, sino todo lo contrario, salvarla de si misma. El grado de esquizofrenia nacional no le permite a Israel entender las implicancias de su propia política y le impiden reconocer el dañó que ella misma se produce con sus propias manos. Si algún día Israel sucumbiera, no será por obra de sus enemigos externos, sino por obra de sus propios líderes. Liberman es más peligroso para Israel que el mismo Ahmadinijan. Por lo tanto, aquellos que sienten simpatía hacia Israel y están preocupados por su supervivencia, deben desactivar el mecanismo de auto-destrucción que funciona en el seno de la sociedad israelí, y esto significa, presionar hasta que Israel se convenza que no tiene más remedio que devolver los territorios ocupados a sus legítimos dueños. La ocupación es un cáncer, y si el gobierno israelí no es capaz de extirparlo por sus propios medios, que los países liberales tomen la iniciativa y lo hagan por la fuerza. No importa cuánto sean ustedes acusados de antisemitas; la historia reconocerá vuestro valioso aporte a la continuidad del Estado de Israel.

Meir Margalit, miembro del Consejo Editorial de SinPermiso, es un dirigente del partido de la izquierda israelí Meretz. Fue concejal electo por ese partido en el ayuntamiento de Jerusalén entre 1998 y 2003.

Clarín continúa su ofensiva en favor del punto G

En su edición de hoy, Clarín anuncia, sin ocultar su optimismo, que todos los argentinos tenemos ahora la posibilidad de acceder al punto G.
Este triunfo de la ciencia aplicada, sería, en definitiva, lo que motivó a millones de personas a volcarse a las calles para festejar el Bicentenario y no una percepción distinta del gobierno nacional. Los mismos blogueros oficialistas lo reconocen. José R. Sentis escribe que el clima... no fue casual.
El Gran Diario ha contribuido a lo largo de las décadas a la constitución de la cultura nacional y popular. Entre esas huellas indelebles, anotamos:
las batallas de petróleo, el acero y la petroquímica,
el algo habrán hecho y
la vida loca.
Pensamiento conservador, sin duda, aunque con el toque de progresismo que le aportan las revista Ñ y Viva.
Digámoslo entonces sin ocultar información: "ya hay argentinas que se operaron". Es que si las escuelas no proporcionan educación sexual básica, aquí está el Gran Diario para proporcionarla.
Esta batalla cultural, la de encontrar el punto G, se viene dando desde principios de 2008, y podemos sumarla -sin hesitar- a las ya viejas del petróleo y el acero, y a las de los últimos tiempos: imponer Expoagro, instalar a Domingo Buzzi como pequeño productor, y tender un manto de sospechas sobre el Banco de Datos Genéticos que, como todos sabemos, está dirigido por Hebe de Bonafini disfrazada de científica molecular.
El medio viene bregando para que el Banco sea dirigido por la médica cubana Hilda Molina.
Fue a principios del mismo 2008 (todavía no se había producido el 17 de octubre de los pooles sojeros en Plaza Mayo), cuando en otro de mis blogs denuncié la situación. Y no lo hice clandestinamente, no recurrí al escrache: escribí en el site del propio Grupo.
"Decíamos entonces" (Unamuno) que Clarín repite como loro que el famoso punto G fue descubierto por el médico alemán Ernst Gräfenberg. De allí que la ciencia lo conozca –al famoso punto– como Gräfenbergpunkt, aunque en castellano suena más romántico, y mucho más en francés. No sabemos cómo se lo pronuncia en lenguajes más arduos como el esquimal o el tamil.
Mencionábamos en aquel entonces que la Consultora Equis había efectuado una encuesta a principios de ese año, cuando todavía no era considerada oficialista. El Punto G era la principal preocupación de los argentinos luego de la inseguridad, la falta de una asignación universal, la estatización de Aerolíneas y la crisis de las AFJP. Para esa época, todavía no se conocía el método de votar negativamente en el Senado con un "sí pero".
El estudio reveló que en la Argentina, el 68.7 de los varones no duerme las 8 horas reglamentarias por causa de ese interrogante. “Lo importante es encontrarlo”, dice Artemio López que dijeron los encuestados.
Una de cada tres mujeres se resiste a ser manipuladas por la misma razón. Y 0.8 de las restantes lo buscan en solitario.
Del citado 68,7% , la mitad es escéptica, pero no abandona la búsqueda “por las dudas”. Un 8.1% preferiría no hallarlo nunca y un 10.0% abandonó hace tiempo, observa el encuestador oficialista.
Y repite como loro, Clarín, porque sus periodistas ocultan que el doctor Gräfenberg no era un marido angustiado por la insatisfacción de su esposa, sino un miembro del equipo de investigación de Joseph Menguele encargado de buscar métodos alternativos de interrogatorio. 

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