jueves, 14 de abril de 2011

Cortinas de humo

Hermosa foto subida al blog Puede Colaborar que dirige Gerardo Yomal (¿POR QUÉ NO LO INVITAN A 678 COMO A HUGO PRESSMAN, EH?) sobre la vida del piloto de pruebas y técnico aeronáutico alemán Edmund Weiss, lo que permite relatar la etapa de consolidación de una industria, la de la defensa, sistemáticamente destruida desde 1955 en adelante.
No es cuestión de belicismo o pacifismo, ni de existencia o ausencia de hipótesis de conflicto. El polo industrial aeronáutico de Cördoba generó un fenomenal desarrollo de las industrias de precisión, experiencia que se fue perdiendo en Argentina no sin antes trasmitirla a Brasil, que es hoy el tercer constructor mundial de aviones.
Cuando todo parecía perdido, y la mítica Fábrica Militar de Aviones (donde también se construyeron automóviles, tractores, camiones, motos, etc.) se había convertido en un predio semi-abandonado de la Lockheed Aircraft Corp., el actual gobierno anuló el convenio con esa industria integrante del siniestro complejo militar-tecnológico de USA.
La foto nos sugiere en qué condiciones se fabricaba el Pulqui II durante los años del primer gobierno peronista. A pulmón. ¿Sabían sus protagonistas que estaban contribuyendo también a construir una épica nacional además de una actividad de punta?
EL proceso de destrucción posterior a la Revolución Libertadora tuvo dos momentos principales: durante la dictadura cívico-militar y en el menemismo. No se trató sólo de desactivar líneas de producción, hacer desaparecer maquinaria y planos originales, rematar como chatarra las existencias, vender ilegalmente patentes al exterior, etc., con su corolario necesario, el cierre de pequeñas industrias y escuelas de técnicos, y la pérdida de fuentes de trabajo.

Menem, Kohan, Corach y Guido di Tella, con el conocimiento de Beraja y de un sector minoritario de la colectividad judía, con la ayuda del periodista Uki Goñi, ingeniaron una espesa cortina de humo (para tapar el saqueo del patrimonio público argentino) que consistió en resignificar la historia del peronismo original mediante el artilugio de una supuesta revisión histórica, según la cual ese desarrollo industrial no existió, o fue inventado, o sobrevalorado, pero en todo caso, fue siempre la excusa para convertir al país en un refugio de criminales nazis.
Salvo casos contadísimos, nunca pudo establecerse que los técnicos alemanes asilados en Argentina hayan tenido algo que ver con genocidios.
Al fin y al cabo, ya el dirigente comunista Vittorio Codovilla había señalado a Perón como agente de Hitler (no sabemos si el denunciante era agente de la KGB) y el PC fue muy tolerante con Videla, cuando la dictadura cívico-militar tenía en la vieja URSS a su principal comprador de granos.
Y Menem, además, le ponía buena cara a Israel mientras tapaba las huellas del atentado a la AMIA mediante un reconocimiento histórico apócrifo.

Entretanto, tanto EEUU como la vieja URSS habían usado distintos métodos, que incluyeron el secuestro y el chantaje, para obligar a que los más talentosos técnicos y científicos alemanes contribuyeran, sí o sí, al desarrollo de sus respectivas industrias nuclear, aeroespacial, de comunicaciones, consolidando su dominio mundial. ¿Acaso Werner von Braun, gloria de la NASA, no fue el desarrollador de la bomba V-1 que asolara Londres?
Miles de estos técnicos y científicos adquirieron las nacionalidades estadounidense o rusa. O brasileña. Argentina, en la medida de sus escasas posibilidades, las de un país periférico de América del Sur, intentó algo parecido, que consistía pura y simplemente en intentar un desarrollo autónomo en una época en la que había un claro espacio para hacerlo.
Esa es la cosa.

5 comentarios:

Daniel dijo...

Mientras leía el artículo me adelantaba con el final que lógicamente llegó, como consecuencia de lo que venías relatando.
Así es con los yankys en todo.
Lo que critican aquí los liberales en el plano económico, lo pueden hacer en el Norte 10 veces amplificado, que se van a hacer los sotas.
No, si el Imperio tiene bien adiestrada a su gente. Años de "Doctrina de seguridad nacional" no fueron en vano.

Moscón dijo...

La de siempre,cuando los yanquis terminan de subir te patean la escalera.

HUINCA dijo...

Hermoso el pulqui... Daniel Santoro (el pintor peronista) hizo con otros locos un documental con el intento de despegar una macromaqueta del pulqui en los bosques de Palermo ¿lo vio?

Abrazo

Jorge Devincenzi dijo...

No, no lo vi... Luego del Pulqui, EEUU desarrolló el Sabre F86 y la URSS el Mig 21, todos basados en el mismo diseño.

HUINCA dijo...

Les paso el link de youtube

http://www.youtube.com/watch?v=x7YlZA--UXs

Abrazo

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