sábado, 2 de febrero de 2013

Reina no: Su Alteza




En el texto es usada varias veces la figura matrimonio morganático, que sería la unión entre dos personas de distinto rango social, en el supuesto de que existan tales rangos. 

En Europa no hubo Asamblea del Año XIII.
Por aquí no hay privilegios de sangre ni matrimonios morganáticos.
Por eso me gusta vivir en América, pero no en la de West Side Story (I like to live in America, etc.) sino en ésta, en Sudamérica, con acento ortográfico.
Celebro además que el propio diario La Nación reconozca hoy lo que anuncié una semana atrás: que la fortuna de los Orange-Nassau supera los 4.500 millones de euros.
El texto que sigue no es para quemarse las pestañas, PERO HAY QUE LEER, una costumbre que algunos tontos y malandras consideran anacrónica.

Historia de los tratamientos en las Casas Reales Europeas


El tratamiento de Alteza comienza a ser utilizado en su forma latina de Celsissimo por los pequeños soberanos italianos.

Autor: 
Carlos Robles Do Campo


Al iniciarse la Edad Moderna, los tratamientos que recibían los soberanos, nobles y grandes señores, eran fruto de tradiciones locales y difícilmente traducibles a otros idiomas. Así, en la península Ibérica la utilización del Don, en las islas Británicas el Sir o Lord, en Francia el Monsieur, eran la mayor parte de los casos suficiente como muestra de deferencia y respeto. Los reyes europeos occidentales recibían comúnmente el tratamiento de Alteza -España, Francia, Inglaterra,...-, y los orientales el de Excelencia -Hungría, Polonia,..-, estando reservado el de Majestad al Emperador del Sacro Imperio. Luis XI, Rey de Francia, se hizo dar por sus súbditos tratamiento de Majestad, pero en las cancillerías europeas no había otra Majestad que la del Emperador.

En los documentos de su época, nuestros Reyes Católicos reciben indistintamente el tratamiento de Alteza, Alteza Serenísima, Serenísimo Señor, Serenísimo Príncipe, etc.

En el Sacro Imperio, los Príncipes Electores recibían desde 1375, por concesión del Emperador Carlos IV el tratamiento de Durchlaucht, traducible por Su Transparencia o Su Serenidad.

Tras la elección del Rey Don Carlos I de España como Emperador del Sacro Imperio en 1519, éste asumió el tratamiento de Majestad. El año siguiente, en el texto del Tratado de Cambray se da al Emperador el tratamiento de Majestad y al Rey de Francia el de Alteza, y en 1544, en el Tratado de Crépy el Emperador es tratado de Majestad Imperial y el Rey de Francia de Majestad Real.

En Inglaterra el rey utiliza aleatoriamente los tratamientos de Majestad, Alteza y Gracia hasta finales del reinado de Jacobo I (1603-1625). El tratamiento de Majestad va generalizándose entre los reyes europeos poco a poco, aunque en los siglos XVI y XVII se utiliza frecuentemente el predicado de Altísimo, Excelentísimo y Potentísimo Príncipe para los Reyes.

El tratamiento de Alteza comienza a ser utilizado en su forma latina de Celsissimo por los pequeños soberanos italianos, las numerosas ramas de los Gonzaga, por ejemplo, reciben el 1 de marzo de 1593 la confirmación imperial del título de príncipes del Sacro Imperio con tratamiento de Celsissimo.

Cuando el Cardenal-Infante Don Fernando, hijo de Don Felipe III, visita Italia en 1633, camino de los Países Bajos, se encuentra rodeado de altezas : los duques de Saboya, Parma, Mantua, Módena, etc. Con la intención de establecer diferencias entre estos pequeños soberanos y él mismo, hijo de un rey, exige y obtiene de los potentados italianos el tratamiento de Alteza Real.

Poco después en Bruselas recibe al Duque de Orleáns, hermano del Rey de Francia, y éste le copia el tratamiento, que se va extendiendo a partir de entonces a los hijos de los reyes europeos. Sin embargo, el tratamiento no se generaliza entre los príncipes reales hasta bien entrado el siglo XVIII, así vemos que en España a los Infantes se les trataba de Serenísimo Señor al igual que a los Archiduques de Austria, en Francia los príncipes eran tratados de Monsieur y Madame o Mademoiselle, etc.

Por contra se genera una auténtica carrera entre los soberanos sin título real para aplicarse el tratamiento de Alteza Real comenzando por el Príncipe de Orange en 1637. El Duque de Saboya, celoso del título de Gran Duque que ostentaba el Soberano de Toscana, se lo atribuye en 1690, poco después le imitan el propio Gran Duque de Toscana en 1692 y el Duque de Lorena en 1700. La cancillería francesa en el siglo XVII atribuía el tratamiento de Alteza a los duques soberanos italianos (Parma, Módena, Mantua, Mirándola, Massa, etc.) y a todos los príncipes y duques alemanes -en contra de los deseos de éstos, que apreciaban más el tratamiento de Durchlaucht-.

En el siglo XVII, los príncipes romanos y napolitanos utilizaban el tratamiento de Celsissimo. En la Francia de Luis XIV, fueron reconocidos como Altezas Serenísimas, en tanto que soberanos extranjeros, el Príncipe Luis I de Mónaco (1642-1701) y el Duque de Bouillon (reconocido Príncipe Extranjero el 2-4-1649), y como miembros de familias soberanas los Lorena, Duques de Guisa (La Fontaine dedica sus fábulas a Su Alteza el Duque de Guisa en 1671), los Saboya, Príncipes de Carignan y Condes de Soissons, y los Rohan como presuntos descendientes de los antiguos Reyes de Bretaña.

En el Imperio Alteza (Hoheit) era considerado superior en rango a Alteza Serenísima (Durchlauchtigst Hochgeboren), mientras en Francia era al contrario, los Hijos y Nietos de Francia recibían el tratamiento de Alteza Real desde 1633, los Príncipes de la Sangre, de Alteza Serenísima desde 1650 y los Legitimados de Francia (descendencia bastarda de Luis XIV) el de Alteza.

Los tratamientos germánicos en el XVII se traducían de forma bastante libre, así Durchlaucht (sereno, transparente) y Durchlauchtig (superlativo de Durchlaucht ) era comúnmente traducido por Alteza; Hochgeboren (alto-nacido) por Ilustrísimo; Hoch- und Wohlgeboren (alto y bien-nacido) por Magnífico; Wohlgeboren (bien-nacido) por Ilustre, etc. El tratamiento de Durchlaucht, en principio privativo de los Electores, le es reconocido en 1648 al Duque Ernesto el Pío de Sajonia, en 1652 al Príncipe Guillermo Federico de Nassau-Dietz, en 1660 al Palgrave de Sulzbach, en 1664 al Duque de Württemberg y a los Margraves de Baden, etc.

Durante el siglo XVIII se generaliza el tratamiento de Alteza Real entre los infantes de España, los archiduques de Austria, los príncipes británicos, nórdicos y polacos, etc. En 1774, Cristián VII de Dinamarca, decide que sólo los hijos del Rey y del Príncipe Heredero recibirán el tratamiento de Alteza Real, los restantes príncipes de Dinamarca recibirán el de Alteza.

La Zarina Isabel de Rusia, que en 1742 nombra a su sobrino el Duque de Holstein-Gottorp Gran Duque Heredero de Rusia, le asigna el tratamiento de Alteza Imperial, inaugurando un nuevo estilo.

En el Sacro Imperio los príncipes y duques reciben comúnmente el tratamiento de Hochgeboren, por ejemplo en 1711 el Príncipe de Löwenstein-Wertheim- Rochefort, los condes inmediatos el de Hoch- und Wohlgeboren, confirmado por el Emperador Carlos VI en 1715, y los barones inmediatos el de Wohlgeboren. En los textos latinos los príncipes germánicos reciben el tratamiento de Celsissimi y los condes el de Ilustrissimi et excelentissimi.

Algunos de ellos utilizan el Alteza Serenísima, como el Príncipe Guillermo IV de Orange, que lo asume en 1733 o el Duque de Curlandia en 1737. En 1742, el Emperador Carlos VII otorga el tratamiento de Durchlauchtigste, superlativo de Durchlaucht, a los Electores del Imperio, el de Durchlaucht a los duques y príncipes, (incluyendo a los landgraves principescos, margraves principescos y condes principescos), y el de Erlaucht, a los condes inmediatos.

Los nuevos príncipes del Imperio, sin embargo, reciben en unos casos el tratamiento de Durchlaucht, como el Príncipe zu Solms-Braunfels en 1742 y el Príncipe von und zu Liechtenstein en 1760, y en otros el de Hochgeboren, como el Príncipe von Isenburg und Büdingen y el Príncipe zu Hohenlohe-Bartenstein en 1744 o los príncipes Esterhazy en 1784, aún más, ese mismo año, el Príncipe de Nassau-Weilburg recibe del Emperador el tratamiento de Durchlauchtigst Hochgeboren.

Los pequeños soberanos italianos mantienen el de Alteza Serenísima, así Gaetano Boncompagni-Ludovisi, III Príncipe de Piombino recibe este tratamiento incluso en 1797 cuando pierde la soberanía.

A comienzos del siglo XIX, Europa se ve inmersa en las consecuencias de la Revolución Francesa y el imperio de Napoleón I. La destrucción del Sacro Imperio, la aceptación de la soberanía de ciertos príncipes alemanes y la mediatización de otros, provoca una avalancha de nuevas altezas que suponen un agravio comparativo para la antigua nobleza de Europa Occidental. Por influencia de la Paz de Viena se produce una jerarquización de los tratamientos que, junto a su traducción alemana, sería la siguiente :


Majestad (Majestät).
Utilizado por todos los Emperadores y Reyes.

Alteza Imperial y Real (Kaiserliche und Königliche Hoheit).
Utilizado por los archiduques de Austria desde 1867 y por el Príncipe Heredero del Imperio alemán desde 1871.

Alteza Imperial (Kaiserliche Hoheit).
Utilizado por los grandes duques de Rusia, la familia imperial francesa desde 1804, los archiduques de Austria desde 1806-1815 y el Heredero de Brasil y su primogénito desde 1824.

Alteza Real (Königliche Hoheit).
Utilizado por los príncipes reales, los príncipes de la Sangre de Francia desde 1824, los Grandes Duques Soberanos desde 1806, por el Elector de Hesse desde 1815 y por los Príncipes Soberanos de Rumania, Bulgaria y Montenegro.

Alteza Gran Ducal (Grossherzogliche Durchlaucht y desde mitad de siglo Grossherzogliche Hoheit).
Utilizado por los príncipes de las casas gran-ducales.

Alteza Ducal (Herzogliche Hoheit).
Utilizado por los Duques Soberanos germanos desde mitad de siglo.

Alteza (Hoheit).
Utilizado por los príncipes más alejados del trono en algunas familias reales, por los Duques Soberanos y luego por los príncipes de sus casas y por familias de la alta nobleza como los Bonaparte de Canino, los Murat, los Ligne...

Alteza Serenísima (Durchlauchtigst Hochgeboren, Durchlaucht, Hochgeboren).
Utilizado por los Duques Soberanos y sus familias hasta mitad de siglo, por los Príncipes Soberanos y sus familias desde 1815, por los Príncipes Mediatizados y sus familias desde 1825, por descendientes de matrimonios morganáticos como los Hanau, los Battenberg, los Teck o los Urach, y por algunas familias de la alta nobleza germánica como los Wrede o los Schönaich-Carolath, polaca como los Czartoryski o los Radziwill y rusa como los Bagration.

Alteza Ilustrísima (Erlaucht).
Utilizado por las ramas condales de familias soberanas alemanas (Lippe, Waldeck), por los Condes mediatizados desde 1829 y por descendientes de matrimonios morganáticos.

Su Gracia Principesca (Fürstliche Gnaden).
Utilizado por algunas grandes familias de la nobleza germánica y por los herederos de algunos príncipes con tratamiento de Durchlaucht.

El siglo XX se ve marcado por la desaparición de la mayor parte de las monarquías con lo que los tratamientos, no sujetos ya a verdaderos actos de soberanía, se toman o se deniegan mediante pactos de familia o decisiones de los jefes de las casas antaño soberanas. Por otra parte, el acceso de personas sin sangre real a las familias aún soberanas obliga a las monarquías a replantearse las titulaciones y tratamientos de sus miembros.

Mientras unas monarquías restringen notablemente el tratamiento de Alteza como Gran Bretaña, Noruega o España, otras actúan al contrario extendiéndolo a toda la descendencia del soberano, Bélgica, Liechtenstein, etc. Resulta de esto que mientras un nieto del Rey de España recibe el tratamiento de Excelentísimo Señor, el séptimo nieto de un Príncipe reinante de Hohenlohe-Langenburg, recibe el de Alteza Serenísima.

Actualmente, ya sea legalmente o por cortesía, podemos resumir el uso de los distintos tratamientos como sigue :


Alteza Imperial y Real:
Los archiduques de Austria y el Heredero del Imperio Alemán.

Alteza Imperial:
Los grandes duques de Rusia, los miembros de la Casa Imperial de Francia y el Heredero del Trono de Brasil.

Alteza Real:
Los infantes de España y Portugal.
Los príncipes de Gran Bretaña, Bélgica, Países Bajos, Luxemburgo, Noruega, Suecia y Dinamarca.
Los príncipes de Grecia, Rumania, Bulgaria, Yugoslavia e Italia.
Los príncipes de Francia, Dos Sicilias, Parma, Prusia, Baviera, Sajonia y Hannover.
Los duques de Württemberg y los duques en Baviera.
Los hijos de los jefes de las Casas Reales de Montenegro y Albania.
Los jefes de las Casas Gran Ducales de Baden, Hesse, Mecklenburg y Oldenburg y de la Casa Electoral de Hesse.
Los príncipes de Georgia.

Alteza Gran Ducal:
Los príncipes de Baden y Hesse y los duques de Mecklenburg y Oldenburg.

Alteza:
Los príncipes de Montenegro y Albania no hijos del Jefe de la Casa.
Los príncipes de Rusia hijos de un gran duque y los primogénitos de su rama.
Los príncipes de las casas ducales de Sajonia-Weimar-Eisenach, Sajonia-Meiningen, Sajonia-Coburgo-Gotha, Anhalt y Schleswig-Holstein.
Los príncipes de Hesse-Philippsthal.
Los príncipes de Orange-Nassau, hijos de la princesa Margarita de los Países Bajos.
Los duques de Mecklenburg-condes von Carlow.
Los príncipes de Ligne, Murat y Altenburg.
El Duque de Hohenberg.

Alteza Serenísima:
Los príncipes de Mónaco y de Liechtenstein.
Los príncipes de Rusia no hijos de un gran duque ni primogénitos de su rama.
Los príncipes de Hohenzollern, Waldeck-Pyrmont, Lippe, Lippe-Biesterfeld, Lippe-Weissenfels, Schaumburg-Lippe y Reuss.
Los miembros de familias mediatizadas alemanas con título de duque o príncipe.
Algunas familias principescas polacas como los Radziwill, los Czartoryski, los Lubomirski...
Algunos príncipes prusianos como los Carolath-Beuthen, Lieven, Pless, Blucher von Wahlstatt, Donnersmarck, Dohna-Schlobitten...
Algunos príncipes austriacos como los Clary und Aldringen, Dietrichstein zu Nikolsburg, Montenuovo...
Descendientes de matrimonios morganáticos como los Hanau (Hesse), Urach (Württemberg), Yuryewski (Rusia), Leuchtenberg (Leuchtenberg-Romanowski), Hohenberg (Austria), ...
Los Rohan, los Biron de Curlandia, los Wrede, el Duque de Beaufort-Spontin...

Alteza Ilustrísima:
Los miembros de familias mediatizadas alemanas con título de conde.
Los condes de Waldeck-Limpurg.
Los condes von Schaumburg, descendientes del matrimonio morganático de un príncipe de Hanau, descendiente a su vez del matrimonio morganático del Elector de Hesse.

3 comentarios:

Moscón dijo...

Pero mirá vos,el embole que tienen estos ñatos para ver quien es mas parásito.

Antonio (el Mayolero) dijo...

Y, como no tienen nada positivo que hacer, se entretienen en estas güevadas....

Tilo, 71 años dijo...

¡Muchas gracias, Jorge! ¡Andaba con unos nervios por no saber qué tratamiento emplear! Ahora me quedo más tranquilo.
Pobre Máxima, tener que exiliarse en los Paises Bajos para poder ser reina. Esto, en los paises serios, NO PASA.

Saludos

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